10/6/15

Diploma

Imaginá que te dan un diploma sobre algo de lo que no tenés la más mínima idea.
Que comenzás la carrera a partir de ese momento.
Que debés ser consciente de la responsabilidad que implica ese título.
Que todos los días tenés que rendir exámen para validarlo, en cualquier horario (incluso, en los más inesperados).
Que las fórmulas, teorías y silogismos que ante tus ojos eran verdades reveladas puedan no ser fácilmente aplicables.
Que muchos te dan consejos para pasar cada prueba pero que, generalmente, no funcionan en tu caso.
Que otros te refriegan en la cara su experiencia haciéndote quedar como un completo neófito.
Y que, además de todo, tu diploma es de un material tan frágil que necesita cuidados constantes.

Eso, más o menos, implica la aventura de ser padres.